Una situación difícil para la industria
En la acostumbrada conferencia de prensa de de la AMIA y AMDA, manifestaron su preocupación por la situación difícil por la que atraviesa la industria automotriz mexicana que tuvo una caída de 37.75 en la venta interna de autos.
Eduardo Solís, presidente de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), en compañía de su homólogo José Gómez Báez de la Asociación Mexicana de Distribuidores de Automotores (AMDA) dijo que la crisis continúa afectando a la industria automotriz mundial influenciada por las dificultades financieras y económicas que atraviesan las principales economías en el mundo.
En el periodo enero – mayo de 2009 el mercado de EE UU disminuyó 36.5%, la Unión Europea cayó 30.5% (preliminar) y en Japón las ventas de vehículos importados, incluyendo los de marcas japonesas fabricados en el exterior cayeron 20.6%, durante este periodo.
En México, la situación económica adversa continúa afectando las perspectivas de los consumidores. De acuerdo a INEGI y Banco de México, el índice de confianza del consumidor (ICC) en México tuvo una caída de 16.9 por ciento en mayo de 2009, comparado con el mismo mes del año anterior ubicándose en 78.3 puntos.
Los cinco componentes del ICC cayeron, incluyendo el que mide las perspectivas de adquisición de bienes durables, el cual se ubicó en 55.5 puntos, representando una reducción de 36.4%
Por su parte, José Gómez Báez señaló que en el mes de mayo se vendieron al público 53 mil 428 unidades, que al compararlas con las 85 mil 823 del mismo mes del 2008, dan como resultado la caída de 37.7 por ciento.
Explicó que «Todos los segmentos reportaron caídas que van del 22 al 82 por ciento y que aún se esperan caídas en el renglón de ventas ya que, históricamente, el periodo del verano es el más bajo en cuanto a comercialización.
Con un volumen de 108,162 unidades en mayo 2009, la producción total de vehículos fue 39.4% menor al mismo mes de 2008. Esta disminución refleja la caída en la demanda nacional e internacional y el esfuerzo que continúan haciendo las empresas armadoras por reducir inventarios, inclusive a través de paros técnicos.
La producción acumulada al quinto mes de 2009 fue de 500,383 vehículos ligeros, 41.7% inferior a la registrada en el mismo periodo de 2008.
La exportación de vehículos mexicanos en el quinto mes de 2009 es -44.3% menor al reporte del mismo mes en 2008 y el acumulado en el periodo enero – mayo asciende a 399,755 vehículos que representa un descenso de 41.5%.
La demanda por vehículos ligeros nuevos en mayo 2009 experimentó una caída de 37.7%, alcanzando una cifra de 53,438 unidades contra 85,823 de mayo 2008. El acumulando al mes de mayo 2009 disminuyó 30.6% en los cinco meses de este año. La venta interna de las empresas americanas cayeron 37.0%; las asiáticas 31.2% y las europeas 13.2% en el mismo periodo.
Posición de marcas
En lo que se refiere a las marcas, en el mes de mayo General Motors tuvo el liderazgo en ventas, la firma estadounidense vendió 10 mil 914 unidades, para una participación de mercado en el mes del 19.1 por ciento; sin embargo, a pesar de colocarse en primer lugar, la cifra de General Motors significa una caída de 46.3 por ciento con respecto a mayo del 2008.
Nissan vendió en el quinto mes de este año un total de 9 mil 434 unidades, con lo que obtuvo una participación de mercado del 17.5 por ciento, pero al igual que General Motors, la cifra le representó una caída en comparación con el mismo mes del año precedente, en este caso del 45.7 por ciento.
En lo que va del año (enero-mayo), Nissan ostenta el liderazgo en ventas en la República Mexicana, con un total de 57 mil 259 unidades, para un 19.1 por ciento de participación de mercado; le siguen General Motors, que ha entregado 54 mi 89 unidades (18 por ciento de participación), y Volkswagen que ha comercializado 44 mil 392 unidades (14.8 por ciento de participación).
Ante esta situación los presidentes de AMIA y AMDA continúan haciendo un llamado a las autoridades gubernamentales para que lleven a cabo implementaciones de programas que saquen a flote a la industria automotriz mexicana que se encuentra en una situación verdaderamente complicada.